Palidece el invierno
en tus brazos
bañados de carmesí
gobernado de dolor
Las risas del averno
sentadas a regazo
del oscuro porvenir
y tu, sumido en sopor
Se despiden los ojos
del mundo conocido
Se apaga la vida
en el desconcierto del horror
Solo un destello rojo
suficiente y retorcido
de una mente malparida
para dejar al mundo sin color
Los diablos dicen adiós
sin esperar la partida
Al paso toman el alma
y el resto empujan al fuego
Tu último rezo a Dios
en una oración sentida
Pero entonces viene la calma
porque sabes que el juego se acabó
sábado, 26 de marzo de 2011
Del infierno
sábado, 12 de marzo de 2011
Por siempre
Hoy escucho al silencio susurrar tu nombre
y miro al pasado
pero no puedo traerlo, ni puedo vencerlo
Es más que una espina en el corazón
más que un nudo en la garganta
es la vida misma, que desea explotar
Dicen que el amor es melancolía
un paño de dolor
una suma de decisiones egoístas
Pero es lo que es, lo que nos toca
lo que hacemos de el
lo que soñamos, lo que no logramos
Puedo perder las cosas una y mil veces
no importa
si con eso te puedo dar el mundo
Sin embargo no puedo darte esa respuesta
no puedo
a pesar del llanto y del tormento
Esa brisa y tu nombre, en mis oídos
y cada detalle, en mi mente
perdurando por siempre, ganándole al olvido
viernes, 4 de marzo de 2011
Pertenencias
Tiene el otoño
la tristeza sin retorno
Tiene la vida
el dolor de los días
Tiene la muerte
quizá las respuestas
Tiene el duelo
el amor que hace daño
Pero...
No tiene el otoño
memorias felices
No tiene la vida
la alegría segura
No tiene la muerte
las palabras justas
No tiene el duelo
la verdad de estos años