sábado, 18 de septiembre de 2010

Gente ignota: Buridán II

1327: - Hijo...
- ¡Papá! Todo el tiempo pensé que mi padre era el obtuso de Roger, ese tosco campesino...
- No seas tonto, Jean, soy el obispo, tu padre en la fe.
- ¡Grap! Cof... ejem... eminencia, a sus órdenes. Antes debo decirle que me ha dado una lección.
- ¿Lección?
- Sí, reflexiono que los enunciados no deben tomarse en forma literal, sino que hay que tener en cuenta las condiciones en que se expresan. ¡Pensé que usted era mi padre!
- Entiendo...
- Y que entonces no tiene sentido una lógica que hable de universales, ya que en cada región e idioma habrá diferentes interpretaciones...
- Entiendo...
- ...con lo que toda idea platónica de entes puros ideales es falaz y...
- ¡Basta de toda esa perorata! Te convoqué para que sepas que serás el nuevo rector de la Universidad.
- ¡¿Yo, que no soy teólogo, sólo un maestro de arte?!
- Sí. Y maestro en el arte de enredar a la gente con sus propias palabras. Vete y entretiene con tu discurso a los papistas, que son más papistas que el papa. Si no puedes con ellos, confúndelos.
- A mi juego me llamaron...

1328: - Alumnos...
Bla, bla, &%#$@, bla, uhh (murmullo generalizado con insultos incluidos)
- Epa, ¿qué sucede? ¡Que hable uno por todos!
- ¡Yo, seño!
- ¿Seño? ¿Qué es ese término en una universidad? Bueno, habla tú, Pierre...
- Es que nos dijo alumnos. Y, como aprendimos latín y griego nos damos cuenta de que nos está insultando.
- ¡¿Por?!
- Es que "a" del griego, significa "sin" y "lumno", del latín "luz". "Sin luz". Se cree que somos tontos...
- Exactamente, ¡Asnos!
- ¡¡Buuuhh!!
- ¿Creen que es válido mezclar así como así raíces idiomáticas sin pagar por ello el precio de la inexactitud? Utilicen la lógica más allá de Aristóteles. Alumno es un término latino, proviene de "alere" y significa "el que se alimenta". En este ámbito escolástico, es "el que alimenta su intelecto". ¿Cómo les quedó el ojo?
- ...
- Marchen a sus estudios, alumnos sin luz.

1330: ¡Maestro Guillermo! He viajado largamente hasta la sombra de esta torre inacabada sólo para verla derrumbarse sobre tu ingeniosa cabeza.
- ¡Jean, querido! Pisa es un buen refugio para quien huye de la prisión papal. Aquí la gente comercia, no pergeña entelequias inexistentes para tener a la plebe bajo su arbitrio. Mira, aquí y allá hay quienes saben leer y sacar cuentas con los números arábigos que trajo Fibonacci. El conocimiento no es propiedad de los poderosos.
- Maestro, esto es una maravilla.
- Mira, no saben quién es el rey ni quién es el papa, que sigue en Avignon en su nube de pedos. Llamo burgueses a esta gente, habitantes de los burgos. Comercian, producen utilizando técnicas asombrosas, ¡hasta muchos leen! ¿Entiendes, Jean? El mundo está cambiando.
- ¿Para bien o para mal, maestro?
- ¿Quien pudiera saberlo?
- ¿Volverás a París? 
- No lo creo, estoy excomulgado. Iré a Munich o en cualquier lugar donde el emperador me permita escribir en paz. Envejezco rápidamente...
- Es cierto, maestro, ojalá llegues a la edad que representas.
- Vete a cagar, Jean.
- En eso estaba, ¿habrá un retrete en esta monstruosa torre?

1337: - Jefe, ¡se desató una guerra con Inglaterra!
- Tranqui, no hay mal que dure cien años...
- Si usted lo dice...
- Por lo pronto terminaré mi obra, es lo que más me interesa.
- Era hora que se haga una casa propia  y deje de garronear en la universidad. De paso, je, je, atiende allí a cortesanas y princesas como usted sabe.
- ¡Calla, imbécil! Mi obra es un tratado que llamaré Summulae dialectica, compendio de dialéctica. Quiero que la lógica, la filosofía natural y la metafísica lleguen a las gentes de los burgos y que el razonamiento de los simples pueda a compararse con el los doctos.
- ¡Fantástico! ¡Todos llegarán a la más alta teología!
- No hay entendido nada, Pierre. La teología no es una ciencia. ¿Qué puedes demostrar de ella? ¿Qué atentos estarán los cielos a tus conjeturas? Más bien se despanzarán de risa al ver tus fútiles intentos de hipotetizar acerca de sus cuestiones. No, no escribiré sobre ello. No quiero ser un Tomás de Aquino edificando un precioso palacio sobre una base de nubes aristotélicas.
- ¿Y si se entera el papa?
- ¡Ja! No pasará nada. Sólo soy un clérigo maestro de arte. No lo olvides. Además, tardarán décadas o centurias en comprender mis argumentos.
- Me refería a sus amantes en la corte, no se salva ni la reina...
- El criminal de Juan murió hace unos años. ¿Qué se puede esperar de Jacques Fournier, que al notificarse de su postulación gritó: ¡Han elegido a un asno!? No entenderá escritos eruditos. En cuanto a lo otro... ¿crees que tirará la primera piedra?
- Pero... ¿no dijo usted que escribe para que los simples entiendan estas cosas?
- Los simples sí, los que se dedican a quemar brujas y proteger su sitial no podrán comprender que el piso tiembla bajo sus pies.
- ¡Usted es un grande, maestro!
- Insisto, Pierre, desconfía de los grandes. No siempre tienen razón. No hay enunciados universales.



Notas:
1327: Es nombrado Rector de la Universidad de París, un hecho inédito teniendo en cuenta que Buridán no es teólogo.

1328: Estudia idiomas relacionándolos con la lógica. Elabora comentarios donde verifica que la comunicación y la elaboración del discurso debe atender a los condicionantes culturales.

1330: Ni idea de si se encontró con Guillermo de Occam, luego de la prisión de éste. Pero quería cerrar el episodio del maestro.

1337: Se desata la Guerra de los Cien Años entre Francia e Inglaterra. Creo que en esos años publica la Summulae, su más grande tratado, que lo ubica como el filósofo medieval más influyente a la par de (y prácticamente opuesto a) Tomás de Aquino. Sin embargo, su fama fue siempre menoscabada -no sólo por la Iglesia sino también por los recopiladores de la filosofía- quién sabe por qué razones. En las últimas décadas se ha reivindicado su obra.

2 comentarios:

SIL dijo...

Dejé un testamento de tres carillas y media en Los Apuntes.

Felicitaciones por estos despliegues de cultura.

Beso

SIL

Netomancia dijo...

Si usted lo dice... ja me mató esa parte! Genial Oso, dan ganas de buscar material de lectura sobre estos hechos.
Un acierto esta forma de contar la historia. Sensacional.
Un abrazo!