sábado, 20 de agosto de 2011

Carta de amor

Este texto a la fuerza tiene que ir en Villeraturas, sería asesinado irremediablemente por los demás relatos en el blog de fondo oscurito, en una rebelión sin precedentes en donde las letras desenvainen sus armas y arremetan contra este intento de algo, que escribiera hace más de un año, para un concurso de (no se rían, no está permitido) Cartas de amor. Ahora que lo leo, es horrible, razón por la cual no apareció ni entre los trescientos mejores. Pero como no tengo otra cosa que subir, y mucho menos (por hoy solamente) ganas de escribir, los hago sufrir con estas oraciones empalagosas y obvias. Tómenlo de ejemplo de cómo no se debe escribir.


A la princesa de mis sueños:

       Un sosegado tumulto en el corazón me dice que debo insistir, princesa mía. El cruel rechazo del que me has hecho merecedor se convierte así en la clara necesidad por la que clama tu alma, de un indicio, una muestra, algo que hable por si solo y sumerja a las palabras en el silencio, en tanto este cariño que juro hasta la eternidad, se eleve con fuerza propia y se instale allí, tras las altas murallas que custodian tus sentimientos.
       He decidido, tras meditarlo en la oscuridad de mi habitación, escuchando como desde la ventana los sonidos del mundo me traían una y otra vez tu imagen, que para alcanzar mi objetivo, tendré que atravesar los obstáculos más sórdidos que mi imaginación pueda trazar sobre ese lienzo alguna vez inmaculado que fue mi mente.
       Escribo estas líneas para que las tengas presente en todo momento y sepas que buscaré las mil maneras posibles de allanar los caminos que conducen a tí. Sinuosos, a veces vacíos de esperanza y otras, muy transitados, esos caminos serán mi haz en la tormenta, la guía en las noches de somnolencia, la cuerda de la cual tirar cuando las fuerzas me abandonen.
       Ten presente, princesa mía, que la flaqueza jamás reinará mis fuerzas y todo esfuerzo será recompensado cuando la gloria nos una por siempre. Del éxito en la empresa, puedes estar seguro. Del tiempo que me demande, es por lo que suplico cada mañana al despertar y cada noche al entornar los párpados.
       De millones de mujeres, me gustas tú. Son tus ojos, tus manos, tu cabello, tu aroma. El cuerpo armonioso, las curvas exactas, las piernas esbeltas, la gracia y la elegancia. De millones de mujeres, eres la que me ha clavado la espina en el corazón, primero repleta de ilusión y luego, como un dardo venenoso, de dolor.
       Pero como ves, en lugar de resentimiento, has despertado un calor cuyas primeras chispas ya conocías. Ahora en mi vive un fuego que necesita de tus abrazos para poder contenerse. Aquel rechazo es tan solo un mal recuerdo. La vida puede pretender de nosotros muchas cosas, pero solo la disfrutamos cuando entendemos que somos nosotros los que debemos exigir y no esperar.
       De mi puño y letra, van estas oraciones. No pretendo que cambies de parecer de la noche a la mañana, ni que tampoco te encierres aún más y hagas como si el pasado no ha existido. Solo ten el valor de aguardarme y verme como un nuevo hombre, pues lo lograré. Alguna vez pensé que el infierno se cernía ante mí, sin darme cuenta que al contrario, era quién lo propagaba alrededor.
       El ayer es innegable. Y tampoco tiene cura. Pero no podemos definir el futuro por lo hecho. Las buenas intenciones a veces pueden serlo todo. He dejado las drogas hoy mismo y este es mi primer acto consciente.
       Me han advertido de los síntomas que seguirán al día de hoy. Será como vivir en una selva, en la soledad de lo desconocido. Sin embargo me aferraré a tu rostro, al deseo de besarte otra vez.
       Lo lograré, porque estoy seguro de ello. Venceré los obstáculos, despejaré el camino. Y un día golpearé a tu puerta, sonriente. No me importa cómo te encuentre, con quién, ni tampoco cuando. Sabrás que soy yo. Y entonces, todo valdrá la pena.

Tu amor, el que siempre se equivocó

7 comentarios:

SIL dijo...

No estoy muy de acuerdo con las apreciaciones previas del autor.

Al margen de castillos y dragones, creo que Sí existen amores así...

:/

Yo perdí con uno que se llamaba ¨Carta de des/amor¨:)

Abrazo grande.

SIL

çç dijo...

Si llego a estar entre el jurado no dudaría en cuestionar los resultados. No de la carta porque desconozco su veracidad pero son sentimientos bellos los que expresa. Saludos.

Netomancia dijo...

Doña Sil, muchas gracias, es una lástima que ya nadie crea en princesas y dragones. En este caso el dragón era la droga y el prisionero era el protagonista. Saludos!

Don CC Rider, agradezco sus palabras. Pero el jurado tuvo razón. Saludos!!!

Con tinta violeta dijo...

Los jurados son personas, así que coincido con Doña Sil y CC rider...se pueden y de hecho se equivocan.
Si el mundo dejó de creer en princesas y dragones, es que ha decidido vivir absolutamente de espaldas a sí mismo, ¡pobrecillo!
A mí el texto me gustó: me presentaré a jurado para tratar de influir, ja!
Besos Neto!

Romina dijo...

Hace años no leo un texto tan conmovedor. Sin ir mas lejos viví muy de cerca un caso muy,pero muy parecido , casi igual le diría. Y se sufre mucho.
Yo soy una romántica empedernida, asi que mi voto es positivo.
Ya se que no me lo pidió pero se lo doy igual porque se lo merece. y no tiene devolución.No insista


Un abrazo♥

Netomancia dijo...

Doña Tinta, muchas gracias! No estoy en contra del jurado, sino del autor ja. Si, es mundo le da la espalda a lo que tiene belleza, lamentablemente. Saludos!

Doña Romina, estar en una situación así debe ser no solo doloroso, sino angustiante. El amor es buen camino para superarlo. Gracias por su voto positivo. Saludos!

Beatriz Salas Escarpa dijo...

No es una carta de amor "al uso, resulta un poco... pero creo que está tan enamorado que roza obsesión.
Esa es mi primera lectura, vuelvo a leerla de nuevo.
Un abrazo y gracias por quedarte en mi blog.