sábado, 7 de diciembre de 2013

Desinformantes

Miró a la cámara con gesto adusto, entorno los ojos y lanzó un suspiro: "Esto es el fin".
Las pocas palabras fueron suficientes. La gente, en sus hogares, comenzó la loca tarea de abandonar la ciudad, pregonando al pasar a los desprevenidos vecinos que habían sido tan descuidados de no estar mirando la televisión, que la hora cúlmine estaba al caer.
En las calles la sinrazón se había apoderado de los otroras civilizados ciudadanos. Algunos se golpeaban entre si para tomar provisiones, otros aprovechaban el caos para ganar las rutas y escapar cuanto antes. Podía verse, al cabo de pocos minutos, un número considerable de fallecidos sobre las veredas o el asfalto, producto de las riñas y el vandalismo.
En la pantalla chica, acaparaban ahora el eje de atención las imágenes de lo que ocurría afuera. En los comercios de electrodomésticos, los televisores encendidos mostrando la desidia, eran arrancados de las vitrinas donde estaban exhibidos.
Alguien en el estudio llegó corriendo con un papel en la mano. Ya no importaba la prolijidad. La situación desbordaba cualquier intento de cordura. El conductor, aún con rostro acongojado, le dio una rápida mirada al texto que contenía. Luego, observando de frente a la cámara, esbozó una sonrisa.
- No serían zombies de verdad, sino protagonistas de una publicidad los seres divisados en un campo cercano, avanzando en dirección a la ciudad. Reiteramos, se trataría de una publicidad.
Miró a un lado y al otro, sin dejar de sonreír.
- Vaya broma, ésta. Por suerte ya estamos informados.

4 comentarios:

SIL dijo...

¡Netito! Las realidades superan cualquier vandalismo de ficción.


Abrazo.

SIL dijo...

Leé esto, Netito:



“El empleo desaforado de comillas en declaraciones falsas o ciertas permite manipulaciones malignas y tergiversaciones venenosas que le dan a la noticia la magnitud de un arma mortal...” (G.G. Márquez)



=)

el oso dijo...

Ayer vi una publicidad de esas...
Abrazo, Neethoven!

El Demiurgo de Hurlingham dijo...

Si fuera un zombie, yo iría tras alguna conductora de noticieros o alguna periodista de policiales.
Esa tendencia alarmista se da con el pronostico del tiempo, como la vez que le pusieron nombre a una serie de tormentas. Lo que fue muy criticado por el servicio metereologico.