viernes, 6 de agosto de 2010

Norman

“Le aseguro Sargento que lo volveré a hacer. Volveré a matar.
Usted dice que yo no le podría hacer daño ni a una mosca. Se equivoca. De hecho las moscas me aborrecen y merecen secarse.
No puedo detenerme y explicarle muchos detalles de mis acciones; pero le aseguro Sargento que volveré a matar.
Cuando la gente mira extrañada a los demás transeúntes no llega a comprender el riesgo que corre. Nadie esta a salvo mientras mi mansión de la colina reclame ser habitada. Algunos han intentado hablarme de un cielo, un tiempo y un paraíso... Le vuelvo a repetir, no dispongo de tiempo.
Otras personas me han ofrecido conversaciones amenas, aunque carentes de sentido. Yo simplemente los observaba como lo hacía con mis viejas aves disecadas. Un pasatiempo no se busca para llenar el tiempo... además, yo no dispongo de él...

¿Qué puedo decirle de todos estos años?
Mis sonrisas eran fingidas, mi mirada observaba más allá de lo que sus absurdos compañeros médicos creyeron ver. Aquel viejo pantano que devoraba a mis víctimas necesita alimentarse otra vez para completar el ciclo de la existencia en esta tierra...
Y la nada conduce a más nada, Sargento. ¡Si al menos dejara de oír a mi madre clamando por venganza!

Le digo que lo volveré a hacer. Ahora me despido en busca de una nueva máscara que me oculte por estos días; quizás como cocinero. Creo que el placer del fuego y la sangre en proceso de cocción será algo adecuado para mis manos.
Recuerde que a veces las cosas se escapan de su control. Entienda que nacimos olvidados en el desierto como un proceso evolutivo de millones de años. Estimado Sargento, hay cosas que se escurren de sus manos; como el tiempo, como la sangre...

Me alejaré un tiempo, y quizás cuando encuentre este carta, yo ya no esté por aquí. Pero de algo podrá estar seguro. Volveré a matar. Se lo aseguro.
Saludos cordiales.

Norman Bates.”

9 comentarios:

Netomancia dijo...

Un personaje clásico en Villeraturas! Bien Dieguito, ese deseo punzante en la mente de un asesino, que sabe, tarde o temprano despertará. Aquel que nace para matar, mata.
Un abrazo!

SIL dijo...

Vaya Psicosis...
Neto no aclara quién es el personaje clásico.
Tiro a acertar al personaje de Hitchcock, por las alusiones que hacés a la maldita madre, etc.
San Google, amén.

Al margen.
La declaración que hace en tu texto es impactante. Se puede sentir la vehemencia del asesino, porque crece renglón a renglón helando la sangre (antes de ser derramada) de los lectores.
Esos saludos cordiales que están al final son un colofón de oro.
Intensifica la calidad de la foto que hacés del psicótico.

Buenísimo, Diego.
Un abrazo

SIL

Con tinta violeta dijo...

Fantástico relato. Llegas a sentir frío al final. Además aún es mejor si uno lo relee viendo la cara del personaje en la película con esa mirada como de mosquita muerta, pero huidiza en extremo y esos movimientos nerviosos...que aquí se han transformado en el manejo de las frases.
Felicidades Diego. ¡Bien hecho!
Abrazos!!!

Felipe R. Avila dijo...

¡Está tan bien escrito,Diego!
Me hiciste acordar de la película, que la vi a los 8 años..uh, que miedito entonces.
Por un momento tambien pensé en ¿cómo lo habria escrito este texto Neto,nuestro amigo especialista en terror?Creo que ambos están en la misma línea o corriente de escritura,che.
Felicitaciones Diego!!!

Anónimo dijo...

Gracias por los halagos! jeje, la verdad Neto que este Norman estaba dando vueltas hace rato por casa y antes que me acuchillará lo invité a Villeraturas y vino encantado!
Sil, gracias por las palabras, y tranquila que el asesino siguió viaje para otro lado así q no hay drama!
Tinta, jaja cuando miré esas peliculas del gran Hitchcock pensaba lo mismo, uno de los grandes aciertos del film fue el genial Antonhy Perkins con sus rostros de mosquita muerta pero cruelmente asesino!
Felipe, que orgullo que me compares con el gran Neto, ojalá pudiera ir por la misma línea que el gran maestro!! Que miedito esas pelis che! yo te juro q si las miro ahora me julepeo otra vez! jejeje

mariarosa dijo...

Al menos él avisaba. No podía controlar sus ansias de matar...
Muy bien logrado, un personaje para el psiquiatrico, listo para el chaleco
De esos que me gustan.Felicitaciones.

mariarosa

el oso dijo...

Dieguito, cuando uno lo lee va escuchando el cui, cui, cuiiiiiiii a las espaldas.
Me gustó mucho esa sobriedad del asesino cuando tiene que comunicar la atrocidad de sus acciones como quien lava la ropa.
Excelente carta!!

Abrazos

Anónimo dijo...

Tranquilo Oso que el cui, cui de la peli lo dejé fuera del cuento para evitar problemas jajaja,
es cierto maria rosa, al menos Norman decía lo que iba a seguir haciendo no? jeje

Escritos en tu nombre dijo...

Lo lleva en la sangre, no puede con su instinto.
Excelente cuento.

saludos.