Cuando dieron a conocer los nombres de los que se salvarían, suspiró aliviado.
La muerte no estaba hecha para él.
Fue entonces a la batalla frente a la otra tribu confiado, desbordado de coraje. Cuando la lanza lo atravesó de un lado a otro, se sintió confundido. Pensó en los viejos brujos, en lo que habían dicho.
La sangre nubló su vista y un instante antes de la oscuridad supo la verdad: los chamanes mentían.
Carlitos
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Con once años son otros los horrores, efectivamente.
Jugar a las escondidas se podría considerar casi normal una tarde de
primavera; jugar en grupo, en la...
Hace 3 semanas
4 comentarios:
La verdad suele revelarse justo un segundo antes de la muerte...
Al menos enfrentó la batalla con un ápice de ventaja:
sin miedo.
:)
Abrazo Netito
SIL
y buehhh, era hora de darse cuanta muchachos, los chamanes, con plumas, sin plumas, con hábitos, sombreritos redondos, barbas o sin barbas, turbantes, crucecitas de madera, de fierro, de oro, con mantitas, con velos, con togas, con lazo, sin lazos, con madre teresas o teresos, con cazuelas de barro y aguas misteriosas, con catedrales o capillitas, con caminitos y peregrinos, con coronas de espinas, cartón, lata o enchapadas, todos, todos, desde el primero al últimos hablan por hablar, mienten, engañan, asesinan y convierten a la humanidad en una manga de seres sin ganas de conocimiento. Pobre tipo, tuvo q darse cuenta cuando la flecha ya lo había ensartado....
abrazotes!!!
Será por eso que cada vez nos creemos menos los cuentos con los que nos regalan a diario por todos los lados.
Me fascinan estos relatos cortos.
Abrazos, Neto!!!
Lástima que uno se aviva cuando es tarde.
Como dijo Paloma, fascinante.
Abrazos
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