lunes, 12 de marzo de 2012

Aniversario

Quedó petrificado delante del calendario. Ese almanaque tan feo que ella había puesto en un costado de la alacena. El mes de marzo estaba rodeado con fibrón rojo y decía en letras grandes "Aniversario".
¡Lo había olvidado! Y entonces supo lo otro, lo peor, aquello que lo había dejado como una roca. Tampoco recordaba la fecha exacta.
Pensar no era su fuerte. ¿Sería en la primera semana? No le convenía, ya había pasado. ¿Y acaso ella no había estado distante los últimos días? Con seguridad la fecha había pasado y ella estaba buscando la manera de echárselo en cara.
Pero tampoco podía quedarse con esa idea, podía ser que aún no llegase la fecha y de esa forma, tendría tiempo para sorprenderla. Pero... ¿cómo iba a averiguar el día exacto? No quedaba bien preguntárselo, y tampoco quería arriesgarse a decir algo como "amor, que te parece si para el aniversario vamos a cenar, te parece esa misma noche o un sábado". Podía funcionar, a menos que cayera un sábado. O que ya hubiese pasado, lo que le daría el pie a ella para arrojar sobre él una catarata de insultos.
Debía hacer algo. Ella entró a la cocina. Traía las compras para el día. La ayudó con las bolsas y le dio un beso. Luego le mostró la mejor de las sonrisas y se lanzó a su suerte: "Amor, que te parece si vamos a cenar para el aniversario".
Ella sonrió de alegría y lo abrazó con ganas. Qué bueno es que tenga tanta mala memoria, pensó. El mes pasado ya había resultado, y ahora otra vez. Suspiró contenta. Para abril iría pensando en un restaurant húngaro, estaba antojada de goulash, pero para esta invitación no tenía dudas: sushi en un japonés.

4 comentarios:

SIL dijo...

jaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa.



:D

Bien por ella, que el plan le sale.

Algunas santas diablitas no los hacen reaccionar ni así.

Un abrazo grande.


SIL

Netomancia dijo...

Doña Sil, hay que reconocer que la hizo muy bien. Gracias! Saludos!

Anónimo dijo...

Gran ardid y desmemoriado el compañero, muy buen texto.

Saludos

Anónimo dijo...

jua jua!!! pero que pícara diablilla! jeje